TARDE DE TOROS
Da comienzo en el ruedo la corrida
el toro está en la arena prepotente,
con asustar a uno es suficiente,
me cita a la salida.
Lo miro sorprendida.
Baja, ¿o aquí no eres tan valiente?,
la muleta en la pata muy chulesco,
vamos. ¿No quieres ver algo grotesco?
Ahora eres el toro,
yo el torero saliente.
Bajas tú al ruedo ¡o subo yo a la grada!,
vamos, que la corrida es en la arena,
y espera la afición exasperada.
¿Tienes miedo? ¡que pena!.
El toro mira y ríe de mi miedo.
El público en las gradas se divierte,
y los músicos tocan con denuedo.
Suena un cohete fuerte,
me despierta, ¡del duelo!,
¡me salvé por los pelos de la muerte!
La Reyna Roja
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