DESPERTAR AL MORIR
De nuevo en la conciencia los diez años
del suceso, nos taladra en la mente
el robo de la vida, que incoherente,
de la mano del odio sembró el daño.
El credo, la pasión, la Biblia en paño
el Corán, la Yihad, rencor creciente,
la vida que sin luz e intransigente
se alió con la muerte y el engaño.
Con el frío metal en la mañana,
despertar al morir, partir al cielo,
entre hierros y gritos en el suelo,
ignorando el porqué de la inhumana
hazaña, que a inocentes desgrana
entre nubes de humo y desconsuelo,
quedando cuerpos inertes en el hielo.
Por la inquina ruin del alma que profana
decide quién merece su castigo,
despojando del eje de la tierra
a quienes no quisieron una guerra
por la que le nombraste tu enemigo.
La Reyna Roja
No hay comentarios:
Publicar un comentario