Van pasando los días esperando tu regreso
sabiendo con certeza que ya no volverás
volviste de nuevo a tu tranquila vida
sin pensar en el dolor que dejabas atrás.
Cerraste el camino sin volver la cabeza
dijiste muy sincero... no puedo verte más
mi vida era tranquila hasta que apareciste
se me ha vuelto difícil y no quiero luchar.
Con solo tres palabras... te quiero adiós amor
amor, en indiferencia fría se transformó
un mundo de dolor en sus hombros calló.
El dolor que algún día olvidará sin duda
el tiempo cura heridas hechas al corazón
solo deja el recuerdo del amor que vivió.
La Reyna Roja
No hay comentarios:
Publicar un comentario