MÍRAME
Te buscaba y te encontré
mirabas a través de los cristales
de el escaparate inmenso de la vida,
absorto en tus locos pensamientos.
Sin saber siquiera que existía ¡me miraste!,
sin veme ni sentirme,
como miras una estatua en el museo,
pero ojos marcaron mi carne con su fuego.
Como una tonta, volvía cada día
a verte a través de los cristales,
e intentar que me vieras algún día
y compartieras tu tiempo al fin conmigo.
Amor mírame, estoy aquí,
soy tu sombra en el cristal
soy la gota de agua que resbala por el
para poder llegar a tus labios.
Alarga tu mano, atrápame,
solo espero que me lleves a tu boca
para poder transformarme,
volver a ser mujer y poder...
Instalarme en la retina de tus ojos,
sumergirme en el arroyo de tu boca,
navegar por los canales de tus manos
enroscarme en el árbol de tu cuerpo.
¡Cógeme!, dame la vida de nuevo
no dejes que resbale hasta el suelo,
me perderé entre los surcos arrastrada
pisoteada por pies desconocidos.
¡Mírame! Estoy aquí bajando,
vuelve a mirarme de nuevo
esta vez fija tus ojos en mi ,
descubre a la mujer que te espera.
Llamándote y deseando que al fin
tus manos apaguen el fuego que brotó,
cuando tus ojos se posaron en mi,
llenando de amor mi corazón.
La Reyna Roja
No hay comentarios:
Publicar un comentario