SOMBRAS |
Cielo negro, noche oscura |
sombras que velan mi sueño etéreo |
luna, escondida tras vasto velo |
de negras nubes con llanto fiero. |
Lloran raudales de tibia agua |
que moja raudo todos mis sueños |
refresca todas mis desventuras |
lava y perfuma mi cuerpo entero. |
Ahora, la sombra de una sonrisa |
surge en mis labios, ya te recuerdo, |
han descargado toda su ira |
las locas nubes y ya te veo. |
Eres la luna que se escondía |
tras esa nube negra y sombría |
que ha conseguido que me despierte |
y te contemple antes del día |
Tu luz refleja allí en el faro |
mi idolatrado mar en la sombra |
sus altas olas brillantes |
de espuma blanca y denso aroma |
Estoy despierta, aquí en la playa |
donde llegue sola en la noche |
y me dormí aquí esperando, |
algún milagro. ¡Verle de nuevo! |
En esta playa le conocí |
espero en ella volverle a ver |
miro, esperando que llegue el día |
y surja en las olas a mi otra vez. |
Ahora el sol de nuevo sale |
miro a lo lejos, pues ya se ve |
el horizonte por donde un día |
sin despedirse mi amor se fue. La Reyna Roja |
miércoles, 2 de noviembre de 2011
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